Me lo acaba de dar un buen amigo y me parece oso polita (muy bonito)
Cuando el árbitro pitó el final del partido, mi hijo de 8 años no pudo aguantar más y rompió a llorar en las gradas de Mestalla. Había sido un día de muchas emociones contenidas y en ese momento no pudo más. Las lágrimas le resbalaban por la cara entre sollozos sileciosos. Era una llanto desconsolado. Ni los gritos de ánimo de la afición, ni los aplausos de los jugadores del Barcelona a nuestros jugadores y a los seguidores del Athletic. Nada podía consolarlo. Se me partió el alma.
¿Cómo explicarle la importancia de haber llegado a una final de Copa y medirse frente al mejor equipo del mundo? Un equipo hecho a golpe de talonario, con jugadores provenientes de prácticamente todo el mundo con el único afán de conseguir títulos y más títulos, y con una afición dispuesta para la victoria pero nunca para la derrota. Y enfrente nuestro Athletic, un Club, un sentimiento, un orgullo, una devoción.
¿Qué otro equipo es capaz de mantenerse en una de las mejores ligas del mundo solo con jugadores de la tierra? ¿Cual es capaz de arrastrar decenas de miles de seguidores y movilizar todo un país con un único sentimiento?
De vuelta al hotel, intentaba yo consolarle con estos argumentos y otros muchos hasta que de pronto me miró fijamente y me dijo:
"Aita, cundo yo sea mayor y juegue la final con el Athletic le quitaré el balón a Messi así, y le regatearé a Puyol así y así y le meteré un gol a Valdés por toda la escuadra así. Y como seré muy bueno, me querrá fichar el Barcelona y el Madrid pero yo como soy euskaldun solo jugaré en el Athletic".
Y me miró sonriendo con ese brillo de ilusión infantil en los ojos que le hizo olvidar la derrota y pensar solo en un Athletic txapeldun.
Y fué entonces, y solo por un fugaz instante, cuando me alegré de que el Athletic hubiera perdido. Porque en ese momento me dí cuenta de que gracias a eso mi hijo había comprendido todo lo que es el Athletic. Una filosofía, un sentimiento, un corazón.
P.D. Perdonad por la txapa. Es la primera vez que escribo y quizás la última, pero tenía que compartir con alguien el orgullo de un padre por su hijo.
¿Cómo explicarle la importancia de haber llegado a una final de Copa y medirse frente al mejor equipo del mundo? Un equipo hecho a golpe de talonario, con jugadores provenientes de prácticamente todo el mundo con el único afán de conseguir títulos y más títulos, y con una afición dispuesta para la victoria pero nunca para la derrota. Y enfrente nuestro Athletic, un Club, un sentimiento, un orgullo, una devoción.
¿Qué otro equipo es capaz de mantenerse en una de las mejores ligas del mundo solo con jugadores de la tierra? ¿Cual es capaz de arrastrar decenas de miles de seguidores y movilizar todo un país con un único sentimiento?
De vuelta al hotel, intentaba yo consolarle con estos argumentos y otros muchos hasta que de pronto me miró fijamente y me dijo:
"Aita, cundo yo sea mayor y juegue la final con el Athletic le quitaré el balón a Messi así, y le regatearé a Puyol así y así y le meteré un gol a Valdés por toda la escuadra así. Y como seré muy bueno, me querrá fichar el Barcelona y el Madrid pero yo como soy euskaldun solo jugaré en el Athletic".
Y me miró sonriendo con ese brillo de ilusión infantil en los ojos que le hizo olvidar la derrota y pensar solo en un Athletic txapeldun.
Y fué entonces, y solo por un fugaz instante, cuando me alegré de que el Athletic hubiera perdido. Porque en ese momento me dí cuenta de que gracias a eso mi hijo había comprendido todo lo que es el Athletic. Una filosofía, un sentimiento, un corazón.
P.D. Perdonad por la txapa. Es la primera vez que escribo y quizás la última, pero tenía que compartir con alguien el orgullo de un padre por su hijo.
1 comentario:
Soy Igone.
Enhorabuena por esa preciada joya que tienes....veo que has tenido mucha, mucha suerte.
Ya que en el foro,se habla siempre de problemas que estos niños arrastran, yo en el fondo no quiero saber.
Me ha encantado tu carta, en serio.
ss
Publicar un comentario